Mi calendario para la guerra de Ucrania

 No hay manera de acertar gran cosa cuando se pone uno pronosticar la evolución de esta guerra, pero aún así, puede ser un interesante ejercicio intentarlo, aunque siempre nos falte un fragmento en el que apoyar nuestras tesis. Como sucede con la torre de la foto, que aún así se sostiene.

Estamos hoy a 6 de octubre, y tras varios meses de contraofensiva ucraniana, tenemos que la cosa ha avanzado o se ha modificado muy poco. El último movimiento serio de esta guerra fue cuando los ucranianos recuperaron importantes áreas de terreno en Jarkov y Jersón. Desde entonces, casi nada de interés, por mucho bombo que se le haya dado por uno y otro bando.

A partir de aquí, lo que me parece más probable:

-Hasta el 10 o el 15 de Noviembre, lo mismo que hasta ahora. Poca cosa o algún intento ucraniano más de romper las líneas rusas, a los que les pronostico un éxito similar al presente.

 -Del 15 de noviembre al 10 de enero, leña rusa a las infraestructuras. Posiciones defensivas de sus tropas y campaña de cohetes, misiles y drones contra la infraestructura energética del país y contra elementos valiosos de las fuerzas armadas ucranianas. Recordemos que casi todo está escondido en zonas boscosas y se van a caer las hojas de los árboles, lo que va a dar ventaja al que tenga aviación, o sea los rusos. No es un factor decisivo, pero cambia sustancialmente las reglas del juego.

-A partir del 10 de enero y hasta el 1 de marzo, ofensiva rusa. Del tipo que sea. Ese es el momento de los rusos de intentar conquistar más terreno o lanzar las fuerzas que hayan podido reunir para ello. El supermartes de las primarias americanas es el 4 de marzo, y todo lo que sea ver a los ucranianos retroceder en esas fechas va a costar un infierno en la campaña electoral de los que promueven la ayuda a Ucrania. En esas fechas, además, el terreno estará probablemente congelado y los árboles sin hojas.

-De mediados de marzo a junio, intentos de negociar una paz. La que sea. Dependiendo de cómo estén las cosas para entonces, las negociaciones pueden ser de un tipo u otro, y pueden salir mejor o peor.

-A partir de junio, si no hay paz, nuevo intento ucraniano de ofensiva o cosa parecida, esta vez ya con aviones occidentales. Y muy previsiblemente los rusos volverán a posiciones defensivas hasta finales de octubre o primeros de noviembre, salvo cambios sustanciales en los mapas durante los meses anteriores. En este escenario, es muy probable que los rusos lanzaran algún ataque fuerte durante la campaña electoral norteamericana, que se dearrolla a finales de Octubre.

En copnclusión: la guerra no va para corto, salvo que uno de los dos bandos colapse antes, que es el objetivo confeso del tipo de contienda que se está librando.